Comunicación
Mercado Laboral Informático: Otra asignatura pendiente en la regulación del sector informático
La “selva de no regulación” de los productos, actividades y servicios informáticos, alimenta una bola de nieve (o quizás más bien de barro), que no para de crecer. Además de las vertientes centrales en relación al interés general, los derechos fundamentales, la delincuencia informática, la delimitación de responsabilidades ante fallos, etc. existen aspectos no menos importantes como la falta de una regulación específica del mercado y las condiciones laborales en el sector informático. Se trata también de una vertiente que afecta a todos los profesionales del sector informático, independientemente de categoría, cualificación o trayectoria profesional específicas (Ingenier@s en informática, ingenier@s técnic@s en informática, titulad@s de formación profesional en informática, trabajadores del sector informático con otras cualificaciones, trabajadores de cualquier cualificación en el sector “amplio” basado en el uso de tecnologías y servicios informáticos, que se ha dado en llamar “economía digital”, etc.) Desgraciadamente nada nuevo bajo el sol, sencillamente un aspecto más de la inacción regulatoria en el ámbito informático en las últimas décadas.
Los profesionales de la ingeniería informática entendemos que la mayor parte de las problemáticas existentes relacionadas con actividades y servicios informáticos tienen su raíz última en el actual escenario de “selva de no regulación” en el ámbito de la informática. También es así en el ámbito laboral donde se acentúan y a veces se cronifican situaciones de: trabajos por encima de la categoría laboral (tareas reales por encima de la categoría de contratación); ausencia de rigor y uso caótico de los perfiles y roles profesionales (falta de profesionalidad en la organización y funciones del personal del área informática, junto con un desconocimiento y uso caótico de los roles y funciones de los profesionales de la informática en la dirección y en el área de recursos humanos); responsabilidades por encima de la categoría laboral (tanto a nivel técnico, como de dirección de personas y de negocio en general); dificultades para realizar formación continua especializada (aunque la empresa sabe de la alta volatilidad e innovación en materia informática, sus profesionales no tienen mayores facilidades para la formación continua especializada, como una vertiente más de su desempeño), horarios inadecuados (No solo por horas extraordinarias sin remuneración, sino por turnos no conciliables con la vida familiar e incluso personal, inhumanas exigencias de disponibilidad inmediata y las 24 horas, cualquier día del año, por supuesto exigencia de total disponibilidad a distancia por via informática y telefónica, etc. Una extraña tendencia de tratar al personal técnico como un nuevo tipo de hardware, como si fueran “servidores”), etc. Adicionalmente hemos asistido a múltiples incidentes en el sector informático con una importante vertiente laboral: Apertura de expediente sancionador contra once empresas TIC por supuestos acuerdos para el reparto del mercado, la fijación de precios y el intercambio de información comercial; Conflictos laborales en varias empresas del sector informático; Demandas de convenio laboral específico, Iniciativas contra la situación laboral, etc.
Hasta el momento la situación se ha sostenido debido a la sobredemanda laboral de profesionales informáticos de todas las categorías y cualificaciones en un entorno general de crisis económica y desempleo. El sector profesional informático es uno de los pocos con niveles de pleno empleo, pero las condiciones laborales no son las adecuadas, y ello es preocupante para la consolidación y promoción de un sector profesional informático sólido, como parte esencial de la productividad y la capacidad de innovación y emprendimiento de nuestro tejido productivo. Es decir, un sector profesional informático sólido y con buenas condiciones laborales y perspectivas de carrera es esencial para la competitividad de nuestra economía en general.
No obstante, la actitud hacia las problemáticas en el ámbito laboral es la misma que ante el resto de problemáticas en al ámbito informático: mirar para otro lado.
La concepción y las acciones que estamos realizando los profesionales de la ingeniería informática desde el Consejo General de Colegios Profesionales de Ingeniería Informática (CCII), responden a una concepción global respecto al conjunto del sector profesional de la informática, independientemente de los niveles de cualificación y responsabilidades. La raíz del problema es común y transversal al conjunto del sector informático (…y de la sociedad en su conjunto). No cejaremos en nuestro empeño de abordar con rigor, y de modo acorde a los tiempos, el problema de raíz, en todas sus vertientes , y no sólo en el ámbito de la ingeniería informática, sino para todas las categorías profesionales del ámbito de la informática, independientemente su cualificación, pues en esta sociedad de la información y el conocimiento es necesario ordenar adecuadamente el desempeño profesional y laboral de los múltiples roles, categorías y funciones profesionales en el ámbito de la informática, y tanto en el sector privado como público.
No hay ningún escenario realista que no pase por aquí, la única duda es cuándo conseguiremos iniciar con fuerza este camino. ¿o vamos a seguir consintiendo la sufrida excusa del “fallo informático” para cualquier cosa? El gigante con los pies de barro cada vez es más enorme y se mantiene en pie a duras penas. La bola de nieve/barro de la “selva de la no regulación” es cada vez mayor y se dirige, cada vez a mayor velocidad, a los pies de barro del gigante ¿habrá que esperar a los escombros de la colisión para hacer algo?