La explosión de posibilidades de la Inteligencia artificial (IA) generativa ha desencadenado una gran inquietud y actividad en relación a las preocupaciones sociales y en general las cuestiones éticas en los sistemas de IA. Más allá de los innumerables contenidos y eventos al respecto, incluso en el ámbito político, el gran reto es como llevar las cuestiones éticas al ciclo de vida de los sistemas de IA. Es decir, al dia a día de las empresas (y organizaciones en general) de un modo práctico, realista y viable. Y en los diferentes roles de las organizaciones respecto a los sistemas de IA: desarrolladores, proveedores, usuarios...